ANTIGUAS CIVILIZACIONES BOTICA DE LA BRUJA CULTURA CELTA EL LEGADO CELTA PAGANISMO
ORÍGENES DEL PAGANISMO

El Paganismo representa una amplia variedad de tradiciones que hacen hincapié en la reverencia por la naturaleza y el resurgimiento de antiguas prácticas religiosas politeístas y animistas. Algunas formas modernas de paganismo tienen sus raíces en el nacionalismo europeo del siglo 19 EC (incluyendo la Orden Británica de Druidas), pero la mayoría de los grupos paganos contemporáneos surgen en la década de los 60’s y se enfocan en la psicología arquetípica y en el interés espiritual por la naturaleza

El Paganismo no es una religión tradicional per se, ya que no tiene ninguna doctrina oficial, pero sí tiene algunas características comunes que unen a la gran variedad de tradiciones.

Una de las creencias más comunes es la presencia divina en la Naturaleza y el respeto al orden natural de la vida. El crecimiento espiritual está relacionado con los ciclos de la Tierra y se pone gran énfasis en las cuestiones ecológicas. En el Paganismo se rechaza casi universalmente el monoteísmo y la mayoría de las tradiciones están interesadas particularmente en el resurgimiento de antiguas tradiciones religiosas politeístas, incluyendo la nórdica (Europa del norte) y la celta (Bretaña).

Muchas tradiciones paganas son intencionalmente reconstruccionistas, ya que su objetivo es revivir muchos de los rituales perdidos de las tradiciones antiguas, incluyendo los días festivos y las celebraciones estacionales. Además de la Naturaleza, muchos paganos le rinden tributo a una gran variedad de dioses y diosas, incluyendo también espíritus que pueden representar a héroes nacionales y locales, así como a miembros fallecidos de las familias. En este sentido, muchos paganos honran a sus ancestros y antepasados. Algunas tradiciones incluyen la magia ritual, pero esta práctica no es universal.

El paganismo es tanto una religión prehistórica como postmoderna y tan antigua como lo son los símbolos de la fertilidad asociados a la veneración de dioses y diosas decenas de miles de años atrás; sin embargo, sus nuevas formas surgieron apenas hacia la mitad del siglo XX.

En términos generales, el Paganismo abarca dos características fundamentales: 1) las prácticas religiosas y espirituales concerniente al culto, o a la devoción de a la Tierra, el Mundo Natural, y/o el universo físico manifiesto; 2) la creencia en seres espirituales: diosas, dioses, espíritus de la naturaleza (hadas, duendes, animales de poder), y espíritus ancestrales. No todas las expresiones del Paganismo incorporan ambas características; es posible ser un místico de la Naturaleza sin adorar a diosas o dioses, y viceversa.

Muchos de dioses y espíritus venerados por los Paganos tienen fuertes lazos con la Naturaleza. (Por ejemplo, los “animales de poder” son espíritus auxiliares en la práctica chamánica, en donde cada uno le corresponde a un animal presente en el mundo físico.)

Por su misma naturaleza, las religiones prehistóricas no han dejado registros escritos, pero las conocemos por sus restos arqueológicos. Alrededor del mundo, los cementerios y sitios ceremoniales revelan la evidencia de prácticas mágicas, rituales de sacrificio, y la veneración de dioses, diosas y/o seres míticos.

Las figuras paleolíticas de mujeres obesas o embarazadas, tales como las descubiertas en Dolní Vestonice en la República Checa, o Willendorf en Austria, pertenecen aproximadamente al 22,000 – 29,000 ACE. Dichas figuras han sido interpretadas como símbolos de fertilidad y de la Diosa; estas interpretaciones sugieren que la humanidad prehistórica dedicaba sus actividades religiosas hacia la Naturaleza, la Tierra, y lo femenino (en oposición a la adoración posterior de dioses celestiales masculinos o deidades trascendentes). Sin embargo, esta especulación no se ha podido demostrar de manera concluyente.

Otra evidencia arqueológica sugiere antiguas prácticas mágicas y religiosas, a menudo con un fuerte enfoque en los simbolismos de la Naturaleza. Por ejemplo, un caldero ornamentado en plata, que se encontró cerca de Gundestrup, Dinamarca, y que se cree es de origen celta, proveniente del siglo 1 ACE, incluye diversos simbolismos mágicos, religiosos y naturales. Resulta particularmente llamativo el símbolo de un hombre sentado con las piernas cruzadas, con una corona astada, y que sostiene un “torque” (collar ceremonial) en una mano y una serpiente en la otra. Esta imagen ha sido interpretada como una representación del Dios de la Fertilidad, Cernunnos (literalmente, ‘el astado’), pero también como un sacerdote o un druida que practica un rito mágico que implica la guía de los espíritus animales.

Frecuentemente, las mitologías de todo el mundo incluyen historias de dioses y diosas con fuertes lazos con el Mundo Natural, incluyendo deidades asociadas con la Tierra, como Gaia o Rea (mitología griega), Nerthus (mitología germana), o Nantosuelta (mitología gala). Muchas deidades estaban asociadas con determinados elementos de la Naturaleza, como los dioses griegos Zeus (cielo y trueno), Poseidón (mar), y Deméter (granos y cosechas).

Es tan fuerte el vínculo del Paganismo con la Naturaleza y la realidad física, que entre muchos practicantes también se entiende como una “Religión de la Naturaleza.” En 279 ACE, un jefe galo llamado Breno, encabezó un grupo de ataque hacia Grecia y saqueó Delphi, el asentamiento de un famoso oráculo. Según el historiador griego del siglo 1, Diodoro de Sicilia, cuando Breno entró en un templo griego y vio a los ídolos de dioses en forma humana, se burló. Al parecer, Breno y todos los galos, no percibían a los dioses y diosas como proyecciones de la personalidad humana, sino como representaciones de diversas fuerzas de la naturaleza.

Estos tipos de espiritualidad enfocados en la Naturaleza, se pueden contrastar con las religiones místicas que hacen hincapié en una realidad espiritual más “elevada” o “mejor” que la Naturaleza. Ejemplos de dichas creencias trascendentales y místicas, incluyen las principales formas del Cristianismo y del Islam. Cuando el cristianismo se convirtió en la religión dominante en Europa, y más tarde en las Américas, contribuyó a la supresión o la marginación de muchas prácticas espirituales indígenas, cuya base era la Naturaleza. No obstante, incluso en las regiones en donde las religiones místicas fueron dominantes, persistieron antiguas formas de culto a la Naturaleza, a menudo como prácticas folklóricas. Un ejemplo de ello es la veneración de las fuentes de agua en Irlanda, en donde los “pozos sagrados” originalmente ofrendados a las deidades paganas locales fueron cristianizados, convirtiéndose así en centros de devoción a la Virgen María o a otros santos. Las creencias populares en las hadas y los elfos también pueden ser restos vestigiales de los principios de la espiritualidad basada en la Naturaleza.

Casi todas las interpretaciones de las antiguas religiones Paganas son objeto de controversia entre los círculos académicos. Aunque los miembros de las tradiciones modernas del Paganismo apelan al pasado para legitimar su práctica, algunos investigadores sostienen que estas expresiones contemporáneas de la religión basada en la Naturaleza, son esencialmente nuevas, y han sido conformadas en respuesta a cuestiones e intereses del momento, relacionándose con el pasado sólo como consecuencia de la información arqueológica y mitológica que busca inspiración.

Entre los siglos XVIII y XX, surgieron diversos movimientos religiosos, particularmente en Europa y América del Norte. Estas religiones están fundamentadas en gran medida en prácticas paganas, como la veneración de la Naturaleza o la devoción a la Diosa Madre. Ejemplos de estas tradiciones incluyen la reconstrucción del Druidismo, la Wicca, y el resurgimiento de las religiones étnicas (como Asatru). Estos resurgimientos y recreaciones del antiguo Paganismo reciben el nombre de Paganismo Contemporáneo (“Nuevo Paganismo”).

Fuente: “The Beginnings of Paganism”. Autor: Carl McColman.
©Morgana Barcelona.

BOTICA DE LA BRUJA CULTURA CELTA EL LEGADO CELTA LEYENDAS CELTAS LIBRO DE LAS SOMBRAS MITOS Y LEYENDAS PAGANISMO PANTEONES
La unión de Dagda y Morrighan

Cuando él la vió por primera vez, ella se estaba bañando al pie de la orilla del río.Piernas esbeltas y largas y muy pálidas, su piel dicen que es del color del hueso pulido, suave como el marfil.

Manos inteligentes y hábiles desataron las nueve trenzas sobre su cabeza, dejando a su pelo derramarse por su espalda desnuda. Era el cabello largo y fino como un hilo de seda y del intenso negro de una noche sin estrellas, con el brillante brillo de las plumas de un cuervo.

Ella cantó suavemente mientras vertía el agua sobre su piel de porcelana. La canción era sombría y alegre a la vez, llena de todo el dolor y el éxtasis que era la vida y a la vez, llena de esa melancolía que deja tras de sí el final de una vida plena. Algo despertó en él que se quedó inmóvil, contemplándola en el sitio. Conocía a esta mujer, y sin embargo, sentía que nada sabía de ella.

Algunos la llamaban Muerte silenciosa, otros la conocían como Reina en la Batalla, pero todo lo que podía ver ahora era una belleza sobrenatural, una promesa dolorosa y peligrosa que anhelaba hacer suya. No se dió cuenta de que se había movido hacia la gran roca plana , como un lecho, hasta que ella estuvo entre sus brazos. Ella lo miró con oscuros ojos de cuervo que reflejaban su propia pasión. Se rió para sí, tal vez parecía extraño que el Dios de la vida y la Diosa de la Muerte hicieran una unión tan apasionada, algo tan místico y sobrenatural como si hielo y fuego lograsen fundirse en un solo elemento.

Pero cuando el sol se hundió y murió el viejo año, entre las sombras de la noche de Samhain , felizmente murió el éxtasis de su amor, sabiendo que al amanecer resucitaría, renacería con nueva fuerza.

El beso de Morrigan puede traer la muerte, pero Dagda sabía que su verdadero don para ella, era morir de amor en sus brazos, para hacerla renacer de nuevo.”

BOTICA DE LA BRUJA DIOSAS ESPIRITUALIDAD LIBRO DE LAS SOMBRAS
LAS DIOSAS OSCURAS

Patronas del cambio, la muerte y la regeneración. Renacimiento.

Para poder conectarnos con nuestra naturaleza más íntima, debemos viajar más lejos en el tiempo, hacia las raíces mismas de los cultos de adoración a la Diosa. Allí nos encontraremos con las Diosas oscuras. Ellas nos darán herramientas muy valiosas para tomar conciencia de nuestro propio poder, hacernos cargo de nuestra vida y vivirla en plenitud.

Durante siglos, hemos confinado en un rincón del inconsciente nuestra verdadera esencia, lo que Clarissa Pinkola Estés llama nuestra “naturaleza salvaje”. Desde muy pequeños hemos sido educados para ser “buenos niños”. No podíamos pelear con nuestros hermanos, ni tener arranques de ira, ni oponernos a lo que otros decidían en nuestro lugar. A medida que fuimos creciendo, hemos profundizado esta socialización (o tal vez deberíamos decir “disociación”) de nuestra verdadera personalidad, a tal punto de no saber dónde está el límite entre lo que realmente deseamos ser y hacer y lo que actuamos sólo por cumplir las expectativas de los demás.

La rabia, la sexualidad, el enfrentar desafíos, superar miedos, nutrirnos a nosotros mismos antes que a los otros y el contacto con nuestro propio poder, son derechos que nos han estado vedados de alguna u otra manera durante mucho tiempo, incluso por nosotros mismos. Algunas de estas represiones, al quedar relegadas a la parte inconsciente de la psique, se transforman en bloqueos que nos impiden vivir nuestra naturaleza en plenitud. Y lo que debería ser un aspecto luminoso, creativo y rico de nuestra personalidad se transforma en una Diosa Oscura.

Cada una de ellas representa una herida. Tomar contacto con ellas sirve para comenzar a sanarlas, liberando nuestro poder. Al traerlas a la luz de la conciencia, podremos descubrir talentos que estaban ocultos y cualidades positivas muy necesarias para salir adelante en la vida. A medida que las vayamos conociendo, nos iremos dando cuenta de que constituyen la parte más viva y rica de la personalidad.

Una vez que podamos aceptar e integrar aquello que más temor nos provoca, nos daremos cuenta de que contamos con recursos muy valiosos para poder llegar a vivir una vida más plena. No puede haber salud mientras todo lo femenino continúe siendo relacionado con lo demoníaco y la oscuridad, con el mal y con el pecado. Ya es tiempo de redimirnos.

En este viaje hacia las Diosas Oscuras que viven en nuestro interior, no hay nada que temer, excepto el miedo mismo. Es él quien en realidad crea todos los demonios.

© Morganna Barcelona

BOTICA DE LA BRUJA BRUJERÍA HECHIZOS LIBRO DE LAS SOMBRAS MAGIA MINERALES RITUALES
El espejo negro

Por su capacidad para duplicar la realidad, los espejos han sido siempre un medio de acceso para la magia y lo sobrenatural y ya en la Antigüedad el arte de la adivinación por medio de espejos, conocido como cristalomancia, era practicado por magos y brujas de muchas culturas. Las antiguas brujas de Tesalia escribían sus oráculos en espejos con sangre humana. Se cuenta que enseñaron a Pitágoras a adivinar sosteniendo un espejo en dirección hacia la Luna.


Este tipo de adivinación adoptó formas muy sofisticadas a lo largo del tiempo y no sólo se utilizaban recipientes de plata, piedras preciosas y agua en un cuenco, sino también las uñas de los dedos muy pulidas. Los espejos muy bruñidos y pintados de negro en el lado convexo se consideraban excelentes instrumentos para desarrollar la clarividencia, de forma similar al uso de una bola de cristal. El ideal es de obsidiana.


Los espejos negros se usaron y usan como potente artilugio mágico. Pero que nadie se lleve a engaño; hay que estar preparados para usarlos con seguridad. Según la tradición, pueden llegar a encerrarse todo tipo de energías en ellos y liberarlas a voluntad del mago.


Durante el ciclo de la luna llena es el mejor momento para crear un espejo negro, ya que la luna rige el tercer ojo y la psique.

Tened presente que hay que activarlo.

© Morganna Barcelona

This site is protected by WP-CopyRightPro