Hávamál
El Hávamál son las palabras de Óðinn, Los dichos o el Discurso del Altísimo, del Antiguo Edda o Edda Poético (Sæmund’s Edda).
Alto / Altísimo era uno de los nombres que se le daban a Óðinn. Es un conjunto de consejos que da el Dios a los hombres de su comunidad, no sólo en el aspecto del comportamiento sino en lo referente a la moral de la sociedad vikinga. Sin duda compuesto en plena era pagana, el Hávamál
es un monumental compendio de sabiduría escandinava, donde se recogen consejos varios sobre las mujeres, los amigos, conducta en los banquetes, ante los huéspedes, normas de hospitalidad, algunas aventuras de Óðinn …
Un complejo poema donde se recogen algunas costumbres vikingas y elementos de gran antigüedad, una joya de sabiduría forjada en esplendor pagano.
1- El hombre que se halla ante umbral ajeno
debe ser cauto antes de cruzarlo,
mirar atentamente su camino:
¿quién sabe de antemano qué enemigos pueden estar sentados
aguardándole en el salón?
2- ¡Salud al anfitrión! Un huésped ha entrado.
¿Dónde ha de sentarse?
Imprudente es él que ante portales desconocidos
confía en su buena suerte.
3- Fuego es necesitado por quien acaba de entrar
cuyas rodillas están entumecidas por el frío
viandas y ropa limpia aquel precisa
que ha recorrido montañas.
4- Agua, también, para que pueda lavarse antes de comer
toalla y calurosa bienvenida,
palabrases corteses, silencio respetuso
para que él pueda contar sus aventuras.
5- Ingenio necesita quien lejos viaja.
fácil resulta en casa;
El hombre de poco seso es con frecuencia objeto de risas
si se sienta en la mesa junto a los sabios.
6- De su saber un hombre nunca debe jactarse
mejor ser parco en el discurso
cuando a su casa un sabio viene:
Nunca se tiene amiga más fiel
que la mucha cordura.
7- El huésped debe ser precavido cuando llegue al banquete
que calle y escuche,
sus oídos atentos, sus ojos alerta:.
Así se protege el hombre sabio.
8- Dichoso el hombre que en su vida es favorecido
con el elogio y la estima de todos;
mal consejo a menudo es dado,
por aquellos de perverso corazón.
9- Dichoso el hombre que en tanto vive
de alabanza y saber goza;
perverso consejo se obtuvo a menudo
salido de mal corazón de mortal.
10- No hay carga mejor para hacer el camino
que la mucha cordura;
es la mejor riqueza, parece, en tierra extraña,
de la miseria protege.
11- No hay carga mejor para hacer el camino
que la mucha cordura;
es la peor vitualla para los caminos
la excesiva ansia de licor.
12- La tan buena cerveza no es para nadie
lo buena que dicen que es,
pues más y más a medida que bebe
el hombre el juicio pierde.
13- Garza llaman del olvido la que se cierne en los banquetes,
el juicio a los hombres roba;
en la hacienda de Gunnlöd preso quedé
en las plumas de ese ave.
14- Embriagado quedé, borracho estuve
allá donde Fjalar el sabio;
bien se bebió si después de la fiesta
el juicio a los hombres torna.
15- Silecncioso y reflexivo es el hijo de rey
y audaz en la guerra sea;
contento y gozoso esté todo hombre
hasta el día en que muera.
16- Espera el cretino vivir por siempre
si evita entrar en pendencias,
mas tregua poca le da la vejez,
si las lanzas sí se la dieran.
17- Abre el tonto grandes ojos al llegar de visita, farfulla o no dice palabra;
al momento luego, si se echa un trago,
ya tiene buen juicio.
18- Tan sólo sabel el que lejos viajó
y por muchos lugares anduvo
con qué juicio rige cada uno
aguda la mente él tiene.
19- No te pegues al cuerno, con tiento bebe el aguamiel,
habla si es preciso, o calla;
de torpeza nadie te acusará
si vas pronto a dormir.
20- El glotón que el juicio no sabe usar
come y arruina su vida;
de mofa sirve entre gente prudente
la panza del hombre insensato.
21- Bien saben las reses cuándo han de ir a casa,
y dejan los pastos;
pero noción ninguna el necio tiene
de cuánto en su panza cabe.
22- El hombre ruin y de mala entraña
se ríe de cualquier cosa;
mas no sabe, y lo habría de saber,:
que faltas también él tiene.
23- Un hombre inculto en vela las noches pasa
pensando en cualquier cosa;
así, está agotado al llegar la mañana,
su miseria sigue igual.
24- Un hombre ignorante cree que son amigos
los que ríen con él;
lo que no sabe es que hablan mal de él
si se sienta entre sabios.
25- Un hombre ignorante que son amigos
los que ríen con él;
he aquí lo que ve cuando pleito tiene:
que pocos hablan por él.
26- Un hombre ignorante cree saberlo todo,
si está en sitio tranquilo;
lo que no sabe es qué ha de responder
si alguno a él le pregunta.
27- Un ignorante que va entre los hombres,
mejor que se esté callado;
nadie le nota lo poco que sabe
a menos que hable en exceso.
28- Por sabio se tiene al que bien pregunta
y sabe bien responder;
nunca ocultan los hijos de los hombres
lo que entre los hombres pasa.
29- Quien nunca calla muchas estupideces dice
y necias palabras:
la lengua desatada, si no se la refrena,
suele hablar contra sí.
30- Por objeto de burla no hay que tomar a otro
cuando llega al banquete;
no sabe bien en el que en el festín se mofa,
si se burla de enemigos.
31- Por sabio se tiene si echa a correr
huésped que de otro se mofa:
juega quizás con mal enemigo
quien hace en la fiesta burlas.
32- Muchos hombres son amables entre sí
que en pugna en la fiesta entran;
discordia entre hombres siempre existirá
si huésped y huésped pelean.
33- Comida temprana debe hacerse siempre,
pero no si a festín irá;
se sienta y está ocioso quien se encuentra hambriento,
conversa le sale poca.
34- Por largo rodeo se va al enemigo,
aunque viva en el camino;
al amigo sincero atajos llevan,
por más que lejos se vaya.
35- Se debe marchar, nunca el huésped ha de estar
siempre en el mismo lugar:
lo dulce se hace odioso si se sienta largo tiempo
en los escaños de otro.
36- El Hogar es mejor, aunque sea pequeño,
en casa se es el rey;
tener sólo dos cabras y una mala cabaña
es mejor que mendigar.
37- El Hogar es mejor, aunque sea pequeñp,
en casa se es el rey;
angra el corazón de quien debe limosnear
a toda hora, la comida.
38- De las armas no hay, en el campo,
que alejarse un paso;
nunca se sabe por esos caminos
cuándo hará falta la lanza.
39- Generoso no vi ni tan buen anfitrión
que rehusara aceptar un regalo
ni tan dadivoso que hallara molesto (verso incompleto)
tener que aceptar a cambio.
40- El dinero que se ha recibido
preciso es aceptarlo,
se le guarda al querido y lo hereda el odiado.
las cosas son peor que pensamos.
41- Con armas y paños se obsequian amigos,
es siempre lo que más luce;
quien regala, quien corresponde, serán amigos más tiempo
si es que el tiempo lo permite.
42- Amigo el hombre será de su amigo,
con regalo al regalo responda;
la risa con risa se debe acoger,
mas falsedad por mentira.
43- Amigo el hombre será de su amigo,
de él y de amigo que él tenga;
mas de enemigo nuca habrá de ser
amigo del amigo.
44- Si tienes amigo en el cual confías
y sacarle provecho quieres,
ábrete a él, cambiaros regalos,
ve con frecuencia a su busca.
45- Si tienes a otro en quien no confías
mas quieres que te haga bien,
dulcemente le hablará, mas tenlo por falso;
paga doblez con engaño.
46- Lo mismo con ese en quien poco cofías
y que no le ves bien la intención:
ríe con él, pero fingiendo;
tal dádiva por su don.
47- Joven yo fui por tiempos, solo viajaba;
perdido quedé en los caminos;
me sentí rico cuando encontré a otro,
es un hombre el gozo de otro.
48- Los guerreros y los bravos son quienes mejor viven
rara vez tienen angustias;
mas el hombre cobarde de todo se asusta,
recela engaño en todo don.
49- Ropas mías les puse en el llano
a dos personajes de leña;
viriles se sintieron vistiendo así,
se avergüenza el desnudo.
50- Sécase el pino que está en un claro,
ni corteza ni agujas lo guardan;
igual con el hombre al que a nadie ama,
¿Para qué sigue él viviendo?
51- Más caliente que el fuego entre malos amigos
la paz cinco días arde;
apágase luego el sexto llegando
y toda amistad se malogra.
52- No grandes han de ser siempre los regalos,
puede el pequeño dar elogios:
con un medio pan y un algo en la copa
me hice de un fiel camarada.
53- A orilla pequeña, pequeño mar:
pequeño es juicio el del hombre;
porque no todos son de igual hechura,
a medias está toda edad.
54- De sabio el hombre lo justo tenga,
nunca sabio en exceso;
más bella es la vida de todos los hombres
que saben mucho.
55- De sabio el hombre lo justo tenga,
nunca sabio en exceso;
pues el alma del sabio rara vez está alegre
si es sabio en demasía.
56- Sabio a medias ha de ser cada uno,
nunca sabio en exceso;
su destino nadie lo prevea
y su alma no tendrá penas.
57- Fuego da el fuego hasta todo quemarlo,
llama de llama prende;
el hombre al hombre conoce por sus palabras,
por sus simplezas al simple.
58- Levántese pronto quien piense tomar
vida o fortuna ajenas:
ni lobo acostado consigue su tajada
ni hombre que duerme victoria.
59- Levántese pronto el escaso de gente
y corra a atender sus faenas;
mucho retrasa quien duerme de más;
será rico el activo.
60- Los secos troncos calcula el hombre
y la piel de abedul para el techo,
y también la leña que gasta en tres meses
y en un medio año.
61- Lavado y comido se irá a la asamblea,
aunque vaya mal vestido;
ni calzado o calzón a nadie avergüencen
ni tampoco el caballo, aunque bueno no sea.
62- Está con la cabeza agachada como un perro husmeando, cuando llega a la orilla del mar
el águila, en la antigua mar;
así el hombre se encuentra entre otros,
con pocos valedores.
63- Preguntas haga y respuestas de
quien quiera lo tengan por sabio;
lo sabido por uno no sepan dos;
si tres, lo saben todos ya.
64- Con tacto siempre el hombre avisado
se debe valer de su fuerza:
se descubre, al ir con los sabios,
que nadie es el mejor.
65- Palabras que a otro el hombre diga
casi siempre las paga luego.
66- En muchos lugares pronto era aún cuando llegué,
demasiado tarde llegaba a otros:
que cerveza no quede o que esté por hacer
mal suele encajar el enojoso.
67- Llamaríanme aquí y allá para todo banquete
si no precisara yo comer
o si dos tajadas tuviera el buen amigo
y no una que yo comí.
68- Cosa no hay mejor que el fuego, piensan los hombres
y la vista del sol
si de buena salud el hombre goza
y de vida sin tacha lleva.
69- Con algo se cuenta, aunque falte salud:
confortan a uno sus hijos,
sus parientes a éste, sus riquezas a aquél,
a otros sus obras bien hechas.
70- Mejor es vivir que ya no vivir:
la vaca el vivo la tiene;
buen fuego yo vi en la casa del rico
y a él a la puerta muerto.
71- El cojo monta a caballo, el manco guía al pastor,
el sordo en la lucha sirve;
mejor estar ciego que estar quemado.
a nadie sirve un cadáver.
72- Es útil un hijo, aunque tarde nazca
y luego que el padre murió;
tan sólo el pariente en honor del pariente
piedra en la senda erige.
73- Con uno dos pueden; por lengua cabeza cae; de mano me cuido que tapa el manto. (estrofa incompleta)
74- Agradece la noche quien confía en su avío;
al remo, apretados los puestos;
en otoño, noche insegura;
ya en cinco días el tiempo cambia,
pero más en un mes.
75- No sabe tampoco el que nada sabe
que a muchos fortuna obceca;
si rico es un hombre, pobre es el otro,
no nada hay que culpar.
76- Mueren riquezas, mueren parientes,
igual morirás tú;
la gloria tan sólo no muere jamás,
de aquel que ganársela logra.
77- Mueren riquezas, mueren parientes,
igual morirás tú;
tan sólo una cosa sé que no muere;
la fama que deja un muerto.
78- Yo vi lleno el redil de los hijos de Fjultung,
ya ahora van con bastón de mendigo:
así es la riqueza, como un parpadeo,
la menos constante amiga.
79- Si ocurre que el necio fortuna alcanza
o logra favor de mujer,
la arrogancia le crece, mas nunca su saber;
de gran presunción se llena.
80- Está comprobado: si runas consultas,
aquellas de origen divino,
las que altos poderes hicieron
y el thul supremo tiñó
mucho se gana callando.
81- Alabar el día y la noche; la mujer ya incinerada;
la espada ya probada; a la doncella ya casada;
el hielo ya cruzado; la cerveza ya bebida.
82- Con viento el árbol se tale;
en bonanza se salga a pescar;
hablar de noche a la moza:
son muchos los ojos del día;
navegar debe el barco, guardar el escudo;
herir la espada y besar la muchacha.
83- Beber, junto al fuego; patinar, por el hielo;
flaco se compra el rocín, con herrumbre la espada;
en casa al caballo se engorda y suelto al perro en el hogar.
II
(PRIMERA NOTICIA DE ODÍN)
84- Que nadie confíe en palabras de moza
ni en nada que diga mujer:
pues en rueda giratoria su corazón se creó,
con la inconstancia en el pecho.
85- De arco quebrado, de llama que arrecia,
de lobo que aúlla o corneja que grazna,
de cerdo que gruñe, de árbol sin raíces,
de ola que crece, de olla que cuece,
86- De dardo que vuela, de tromba que viene,
de hielo de un día, de serpiente enroscada,
de tratos en cama o de espada rota,
del juego del oso, o de hijo de rey,
87- de ternero doliente, de esclavo voluntario,
de buenas palabras de völva, de cadáver reciente,
88- del campo recién sembrado: que en eso nadie crea,
ni muy pronto en el hijo;
decide en el campo el tiempo y en el hijo la razón,
son dos cosas peligrosas.
89- de aquel, si lo ves, que a tu hermano mató
de mansión mal quemada, de caballo muy veloz- no sirve el corcel si se rompe una pata -,
de nada de esto seguro te fíes.
90- Pues la paz con las mujeres que hablan con falsedad es montar corcel sin bridas sobre hielo resbalante,
caballo alegre y de dos años aún mal domado,
o bogar con viento en popa en un buque sin timón,
o ir cojo tras reno en el talud de una colina en pleno deshielo.
91- Mas digo verdad, pues ambos conozco:
muda el hombre su humor con la dama;
las más bellas palabras decimos sin pensarlas,
se engaña así el juicio del sabio.
92- Bellamente hablará y le llevará regalos
quien quiera amor de dama;
alabará el cuerpo a la hermosa muchacha;
recibe amor quien ama.
93- Nadie a un hombre jamás le censure
amor que otro tenga;
conmueven al sabio, no conmueven al necio,
los rostros de amable color.
94- Nadie en un hombre censure nunca
cosa que a tantos pasa:
en tonto al sabio, así vuelve a los hombres
el ardiente deseo.
95- El espíritu sabe qué hay junto al corazón,
solo está con su amor;
no hay para el sabio dolencia peor
que el no estar contento consigo mismo.
96- Claro lo vi cuando allá entre los juncos
goces de amor me esperaba;
corazón y carne yo puse en la moza;
aunque aún no la tenía.
97- A la hija de Billing dormida hallé
clara como el sol, en su lecho;
la suerte de un príncipe hubiera yo dado
por gozar de aquel cuerpo.
98- «Pero luego a la noche, Odín, volverás,
si tratarme de amores quieres;
que de esta torpeza nadie se entere
sino sólo nosotros solos».
99- Del cierto placer me abstuve entonces
pensando que ella me amaba;
seguro creí que después gozaría
de todo su amor y favores.
100- Cuando luego volví, feroces guerreros
alerta guardia montaban
con fuego de teas y antorchas en alto.
¡Mal paso allí se me abría!
101- Ya cerca del alba de nuevo volví:
ahora los hombres dormían;
una perra sólo hallé, de la buena mujer,
atada a su cama.
102- Muchas buenas mozas, si se observa bien,
son falsas con los hombres;
claro lo vi cuando yo quise
conquistar a la insidiosa:
todas las desgracias me causó la sabia hembra,
nada logré de la dama.
III
(SEGUNDA NOTICIA DE ODÍN)
103- Alegre en su casa, festivo con huésped
y cauto ha de ser el hombre;
memorioso y locuaz, si quiere ser sabio;
lo bueno a menudo cuente.
gran estúpido se llama el que apenas puede hablar,
cosa es propia de ignorantes.
104- Visité al viejo gigante; heme aquí vivo;
apenas pude allí estar callado:
parla abundante servicio me hizo
en la sala de Suttung.
105- Con la boca de Rati camino me abrí
con ella la roca royendo:
por alto y por bajo – arriesgué la cabeza –
pasábanme sendas de trols.
106- Gunnlöd me dio a beber, sentada en su trono de oro,
del excelso hidromiel;
mal yo a ella después le pagué
su buena intención,
su sentir sincero.
107- De la bien conseguida bien me he gozado
de poco le falta al sabio;
y Ódrerir ahora en lo alto está,
en el templo del dios de los hombres.
108- Todavía quizás pudiera yo verme
allá en el reducto del ogro
de no haberme servido de Gunnlöd hermosa,
en cuyos brazos estuve.
109- Al día siguiente, fueron los trols de escarcha
a interrogar al Altísimo, en la sala del Altísimo:
que si vivo volvió con los dioses Bölverk
o si Suttung lo había inmolado.
110- Juró Odín sobre el anillo, así creo que lo hizo,
¿qué creer ahora de sus palabras?
Traicionado a Suttung dejó a su partida
y a Gunnlöd llorando.
IV
(DISCURSO DE LODDFÁFNIR)
111- Tiempo es de hechizar en el trono del thul,
a la vera del pozo de Urd;
yo vi y callé, yo vi y medité,
al habla atendí de los dioses;
de las runas oí, su poder escuché
por la sala del Altísimo,
en la sala del Altísimo.
Esto escuché que decían:
112- Te damos Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
De noche no salgas si no es a vigilar
o un lugar buscar afuera.
113- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
de una hechicera no duermas en el regazo
no te enlace con sus miembros.
114- Ella te hará que no tengas en nada
asamblea o palabra de rey,
que ni quieras comida ni trato con nadie
y todo angustiado te acuestes.
115- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
la mujer de otro nunca seduzcas
para hacerla tu amante.
116- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Si has de viajar por montaña o por fiordo
date una buena comida.
117- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Nunca le cuentes al hombre malo
desgracia que tengas;
porque del hombre malo nunca obtendrás
pago por tu buen deseo.
118- Ferzomente mordido he visto un hombre
por palabras de mala mujer:
la falsa palabra provocó su muerte,
un hombre en verdad sin culpa.
119- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Si tienes amigo en el cual confías,
vete a menudo en su busca;
de zarzas se cubre y de altas hierbas
en senda que nadie pisa.
120- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Procura ganarte al hombre bueno;
conjuros aprende siempre.
121- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
No seas tú nunca el primero en romper
con un amigo;
la pena mata al corazón si a nadie puedes decir
todo aquello que piensas.
122- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
No tengas jamás discusión ninguna
con un simio ignorante.
123- Pues del hombre malo nunca has de obtener
buena recompensa;
el hombre bueno será quien te logre
renombre y fama.
124- Por igual que un hermano tiénese aquel
al que todo se cuenta;
todo es mejor que ser mentiroso,
no es bueno el amigo que a todo asiente.
125- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te servirá, si lo sigues:
Nunca digas a un hombre peor que tú, ni tres feas palabras;
a menudo el mejor cede
cuando busca el peor pelea.
126- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Harás un zapato o harás una lanza
sólo si son para ti;
mal hecho el zapato o la lanza torcida
y tu mal te desean.
127- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Donde hallares maldad con maldad responde.
no des tregua al enemigo.
128- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
contento con el mal no has de estar nunca,
lo bueno alegrarte debe.
129- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
mirar hacia arriba no debes, en la lucha
-cobardes como puercos se vuelven los hombres-,
que tu mente no embrujen.
130- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
que te será bueno, si lo sigues:
Si quieres ganarte a hermosa muchacha
y conseguir su favor,
prométele y dile y cúmplele siempre:
a nadie buen trato hastía.
131- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Se cauto, te aconsejo, mas no cauto en exceso;
sobre todo bebiendo o con hembra casada,
y en una tercera cosa, también: no te engañen los ladrones.
132- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Nunca de un huésped te rías o burles
ni de un caminante.
133- A menudo no saben los que dentro se sientan
qué hombres serán los llegados:
nadie hay tan bueno que falla no tenga
ni tan malo que nunca sirva.
134- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Del supremo thul jamás te rías:
es bueno a menudo lo dicho por viejo;
a menudo bien habla el talego curtido,
el que cuelga entre cueros
y entre pieles se mece
y entre tripas se orea.
135- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
No te burles del huésped ni lo eches afuera,
dale buen trato al pobre.
136- Fuerte el traveseño será que se desliza
para abrir a todos;
si limosna no das, un mal te desean,
dolor que tus miembros cojan.
137- Te damos, Loddfáfnir, buen consejo
que te ha de servir, si lo tomas
te será bueno, si lo sigues:
Cuando mucho bebieres, recurre al poder de la tierra,
de embriaguez la tierra libra, como el fuego de epidemia,
de pujo el roble, grano de trigo del mal de ojo,
de sofoco el saúco -la luna invoca contra el odio -,
de picada el brezo, de la desgracia las runas,
del vómito libra el suelo. (estrofa incompleta)
V
(HISTORIA DE LAS RUNAS DE ODÍN)
138- Sé que pendí nueve noches enteras
del árbol que mece el viento;
herido de lanza y a Odín ofrecido
-yo mismo ofrecido a mí mismo-
del árbol colgué del que nadie sabe
el origen de sus raíces.
139- Ni pan me tendieron ni cuerno de bebida;
fijo en lo hondo miré;
las runas alcé, las gané entre gritos;
caí a la tierra de nuevo.
140- Nueve conjuros del hijo de Bölthur,
del padre de Bestla, aprendí,
y también he bebido el excelso hidromiel,
derramado Odrérir.
141- Empecé así a germinar y a ser sabio,
y a crecer y sentirme bien:
una palabra dio otra, la palabra me llevaba,
un acto dio otro, el acto me llevaba.
142- Descubre las runas y aprende los signos,
las runas de mucha fuerza,
las runas de mucho poder,
que el thul supremo tiñó
y los altos poderes hicieron
y el señor de los dioses grabó.
143- A los ases Odín, a los elfos Dáin,
a los enanos grabóselas Dvalin,
a los gigantes Asvid;
yo mismo grabé las runas.
144- ¿Las sabes tú grabar? ¿Las sabes tú interpretar?
¿Las sabes tu teñir? ¿Las sabes tú probar?
¿Les sabes tú pedir? ¿Les sabes tú ofrender?
¿Les sabes tú ofrecer? ¿Les sabes tú inmolar?
145- Mejor no pedir que por todo ofrendar;
su pago la ofrenda busca;
mejor no ofrecer que en exceso ofrecer.
Así grabó Thund antes de surgir los pueblos;
allá revivió cuando vino de nuevo.
VI
(SERIE DE CONJUROS)
146- Los conjuros que sé yo que ni esposa de rey
ni hombre alguno sabe:
“auxilio” se llama uno y el que auxilio te da
en pleitos y penas y en malas dolencias.
147- El segundo sé, remedio de aquellos
que quieren ser curanderos.
148- El tercero sé, si mucho preciso
atar a mi enemigo:
sus filos le emboto a aquel mi adversario
y ni armas ni mañas le valen.
149- El cuarto sé, si preso me ponen los guerreros
y atados los miembros tengo:
yo canto el conjuro y me puedo escapar;
libres los pies se me quedan,
y de mi cuello la argolla.
150- El quinto sé, si dardo yo veo
que busca traidor a mi gente:
por recia que vuele parada la dejo,
tan sólo con mi mirada.
151- El sexto sé, si con raíz me laceran
del árbol con savia tomada:
el hechizo que a mí aquel hombre me canta
él se lo sufre y no yo.
152- El séptimo sé, si la altas llama
veo entre mis camaradas sentados en los bancos:
por mucho que arda salvarlos puedo,
tal el conjuro que canto.
153- El octavo sé, ese que siempre
útil será que se aprenda:
odio que surja entre hijos de jefe,
puedo enseguida calmarlos.
154- El noveno sé, si mi barco peligra
y lo he de salvar en la mar:
yo el viento detengo que azota las olas
y toda la mar sosiego.
155- El décimo sé, si brujas veo
que arriba están por los aires:
de manera que yo hago que descarriadas huyan
y no encuentran su propia forma
no encuentran su propio juicio.
156- El undécimo sé, si a la guerra llevo
a mi tropa de viejos amigos:
sobre mi escudo les canto y ellos con fuerza
indemnes en la lucha entran,
indemes de la lucha salen,
indemnes me regresan de ella.
157- El duodécimo sé, si veo al ahorcado
que arriba en el árbol se mece:
de manera yo grabo y las runas tiño
que el muerto se anima
y me tiene que hablar.
158- El decimotercero sé, si al nuevo guerrero debo
rociar con el agua:
no caerá él si a la guerra fuere,
lo respetan a él las espadas.
159- El decimocuarto sé, si yo entre los hombres
decir de los dioses debo:
de los Ases y Elfos sé todas las cosas,
pocos sabios lo saben.
160- El decimoquinto sé, que el enano Thjódrörir
a las puertas de Delling cantó:
con la fuerza de los ases, con la gloria de los elfos,
lo cantó a Hroptatýr con la ciencia.
161- El decimosexto sé, si quiero de mujer sabia
lograr amor y favor:
la mente dirijo de la hembra de blancos brazos
y su ánimo altero todo.
162- El decimoséptimo sé, la joven doncella
que no se me vaya.
Nunca, Loddfáfnir, tuyos serán
estos conjuros,
aunque has de saberlos,
debes ganarlos,
te urge obtenerlos.
163- El decimoctavo sé, aquel que jamás
a doncella diré ni a mujer casada
-es siempre mejor que sólo uno lo sepa;
y aquí los conjuros acaban-,
sino a aquella tan sólo que me toma en sus brazos
y también a mi hermana.
164- Ya ahora en la sala del Altísimo
los dichos del Altísimo se cantaron
para todo provecho del hombre,
para poco provecho del ogro.
¡Salud al que dijo! ¡Salud al que supo!
¡Quien algo aprendió, que lo goce!
¡Salud a los que esto oyeron!
¿Qué es la Wicca nórdica?
Después de leer este texto (como he podido con traductores online, porque no domino el inglés) no me queda nada más que estar completamente de acuerdo a esa necesaria apertura de mente; a no quedarnos pillados en lo que pudo haber sido y no fue, sino en lo que es o debería ser; en el no tener la necesidad de criticarlo todo porque no sea lo que nosotros creemos si está dentro de una lógica; en el no sincretizar sin saber lo que sincretizamos; en el investigar antes de sincretizar; en el no sincretizar porque nos apetece o nos va bien. Hemos de tener cultura histórica y ver si ese sincretismo tiene sentido o no… y si lo tiene ¡adelante!. Desde el respeto y la humildad. Porque el sincretismo bien sincretizado (valga la redundancia) nos enriquece, la mezcla no. Y tendemos más a la mezcla que al sincretismo.
Con derechos de autor por Tyra Alrune Sahsnotasvriunt de 2014.
La mayoría de los Infieles jadean de terror ante la idea de la Wicca Nórdica y son rápidos en señalar que los principios Wicca y los Eddic nunca podrían fusionarse, mientras que ni siquiera levantan una ceja ante la Wicca egipcia, griega, romana o de otros tipos.
Lo que irrita a la mayoría de las ellos es la supuesta naturaleza de la Wicca de “esponja”: la regla de tres y el sin dañar.
Nuestros antepasados germánicos y nórdicos eran unas gentes duras pero también lúdicas y el resurgimiento de la espiritualidad nórdica a menudo se olvida de la parte lúdica y alegre y en su lugar se centra en su naturaleza guerrera. Pero la rasgadura de un elemento fuera de contexto de toda una espiritualidad por supuesto no tiene mucho sentido y por lo tanto yo os anuncio que los nórdicos Wicca se acerca mucho más a la espiritualidad de nuestros antepasados que los infieles que hoy en día se han convertido a esta fe, en especial en América.
Simplemente porque la mayoría de nuestros antepasados eran agricultores, comerciantes y artesanos en lugar de Reyes o Jefes militares heróicos.
(A partir de los santuarios de las matronas y la Nornen tenemos la “triple diosa”)
Vivieron una vida llena de austeridad durante los largos y duros inviernos, una vida llena de trabajo duro y la lucha por sobrevivir durante todo el año. Ellos disfrutaban también de juegos, concursos, la competición y una espiritualidad más bien brusca pero alegre, hecho que compensaba su ardua vida cotidiana.
El (popular) saber y sagas se pasaron tradicionalmente a la siguiente generación através de la vía oral y los Eddas mismos fueron escritos en el año 1300 por un islandés ya cristianizado: Snorri nombrado Sturlason.
Se encontraba en el dilema de tener que cumplir con las estrictas leyes de la iglesia (declarando todo lo no cristiano como herejía y blasfemia) bajo pena de muerte, sin dejar de querer anotar los cuentos y creencias de sus antepasados nórdicos.
Se puede suponerse que tuvo que “comprometerse” en ciertas áreas, por lo que todo lo que se ha escrito acerca de nuestros antepasados, y que no fue tomado directamente de las runas, debe tomarse con un grano de sal.
Sin embargo, los Eddas y especialmente el Hávamál, las palabras del auto-proclamado “Padre de Todos” Wotan/Odin, hablan regularmente de represalia hacia los enemigos, así como del fuerte código moral de la lealtad, la honestidad, la verdad, el honor y la defensa de sí mismo y su propia gente, mientras que alaban tanto la fuerza física como la fuerza mental.
Y es también por la muerte y la carnicería, por el asesinato de Jotun (gigante Ymir) a manos de Wotan, que se crearon los nueve mundos y en última instancia la humanidad.
El hijo de Wotan, Thor, es otro “asesino de gigantes” faring de las tierras de Jotnar, que siempre aburrido golpea con el fin de ejercer su poder con el martillo Mjölnir y matar a todo en su camino. Surtr va a quemar los mundos en el Ragnarök, el equivalente nórdico de Armagedón y hay muchos más de esa naturaleza. En otras palabras: la guerra sin duda es un tema común en las Eddas, sí. Pero NO el único.
Hay muchos dioses y diosas de carácter más suave, cuyas historias encuentra menor reconocimiento entre los Paganos con ganas de guerra, nuevamente.
Está Eostre, de la que parte el día de fiesta del mismo nombre, más conocido como “Pascua”, proviene de hrönir que (al menos en la Edda) ayudó a Wotan a crear los mundos junto con Loki y que se la conoce como “la silenciosa”, que también puede traducirse como “la mansa” en nórdico antiguo. Eir es la diosa de la curación Aesir, Baldur el Dios de la regeneración, la paz y la belleza. Y así sigue y sigue.
Si ahora volvemos al principio de “haz lo que quieras sin dañar”, yo personalmente no conozco un solo Wicca que dé fe de ello sin explicarlo un poco más. El principio aquí no es muy diferente de la regla de oro de Buda, el cristianismo de “no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hicieran a ti”, y la ley central de muchas otras religiones. Incluso está bastante cerca de la filosofía imperativa categórica de Kant.
Se trata de un “Haz todo lo posible para no perjudicar a nadie”, o también un “Tratar de encontrar una solución que haga el menor daño posible a todos los involucrados.” Daño ninguno es imposible. Muchos de sus seguidores saben comen carne, usan zapatos de cuero, a diferencia de usar un matamoscas, hacen actos fallidos o sacan el lado malo de la gente de vez en cuando, así que tomarlo completamente literal, no tiene mucho sentido, por supuesto.
En cuanto a la regla de tres, “Haga lo que haga va a volver a usted tres veces” el núcleo de ella, del mismo modo, se pueden encontrar en las Eddas como “Lo que se siembra se cosecha”.
¿Qué otra cosa sobre Lokasenna?: En este capítulo de los Eddas, los dioses Aesir junto con Loki, se sientan en el Valhalla a disfrutar de una gran fiesta, cuando Loki se eleva a su vez a cada dios único para recordarle sus errores, malas acciones (pecados) y recuerda sus declaraciones con insultos personales.
Y razón tiene, la tribu arrogante, la actual “casta” de los dioses Aesir con Wotan – el Dios de la corrupción y el crimen, como su rey – se enfrentarán todos sus errores hechos del miedo a perder su estado y superioridad. En el Ragnarök, los mundos “terminarán”. Lo que se siembra se cosecha en verdad.
Wicca no es dualista, sino una religión muy inclusiva, acepta que toda la naturaleza y todos los elementos del círculo de la vida son necesarios y hermoso a su manera, no sólo las estrellas, la luna, las flores de la primavera y las majestuosas puestas de sol, sino también laas tormentas eléctricas, tornados, la cadena alimentaria y la muerte tanto como la vida. Gerald Gardner estaba deseoso de promover una imagen más positiva de la brujería y la Wicca y destacó su moderación, cualidades más suaves y más alegres, pero es más que eso.
Las creencias germánicas y nórdicas son en parte muy similares, a pesar de que, también, se han mal interpretado deliberadamente por la mayoría de los “paganos” o convertidos en lugar de paganos (Heathen).
Los dioses Aesir siempre están reteniendo a los dioses Jotnar y Rökkr (aquellos que traerá sobre Ragnarök). Por lo general son considerados caóticos, pero en realidad son las fuerzas de la evolución de la naturaleza; el estancamiento y la evolución luchando constantemente entre sí, algunos dicen que entre ellos mantienen así el registro de entrada.
Los Vanir están entre estos dos, después de la guerra Aesir/Vanir, los Vanir fueron básicamente anexados pero aún no estaban en guerra con los gigantes. Una trinidad de equilibrio si se desea.
Por supuesto, la siguiente cosa que los paganos extremistas atacarán es la mágica (o como se de reprochó, “su magjickckk Pagan o como se llame”.), afirmando que nuestros antepasados no practican la magia. De verdad!
Y ¿qué que le llame Seidr, Spae y Galdr? ¿Por qué hay encantamientos mágicos o inscripciones en los cuernos para beber, timones de batalla y armamento e incluso en otros artículos de uso diario, que se encuentra desde hace casi mil años?
¿El mismo Wotan no aprendió la práctica “femenina” de echar las runas, de las prácticas mágicas mencionados en el encabezamiento? Oh, teníamos magia.
Incluso una transferencia sencilla mediante el uso de sangre ya tenía algo mágico, destinado a tejer una conexión entre el hombre y Dios o recurrir a un cierto dios o diosa – de ahí el nombre “Blót” que simplemente significa sangre -.
Algunos de los paganos, especialmente aquellos en la periferia como los Odinistas, critican la práctica de Ásatrú de apelar a los cuatro enanos al crear un Vé (espacio sagrado) o comenzar un Blot, ritual o día de celebración, ya que es desconocen lo histórico y lo hacen llamando a las cuatro esquinas. De hecho, hay mucha críticapara tratar de establecer nuevos rituales basados en nuestros códigos morales antiguos, las creencias, la tradición y lo poco que sabemos acerca de nuestra religión y la magia.
Por desgracia, casi todo fue destruioa debido a la violenta cristianización y por lo tanto tenemos que, pieza a pieza, juntar los hechos y rellenar los espacios en blanco porque los hechos se han perdido. Tal vez ahora el ritual es menos “por derecho e históricamente auténtico”, pero hay mucho más que la intención detrás de un ritual? Al menos en el caso de … simplemente no tener ninguna fuente históricas para hacer?! … Después de todo, a lo largo de los siglos nuestros antepasados habían desarrollado y mantenido sus prácticas así, con toda naturalidad y en el tiempo.
Y no todas las tribus celebraban las mismas creencias, ni creían en los mismos dioses e, incluso, ni sabían de ellos. Así que tal vez un poco más aceptación y apertura mental sería lo adecuado para nuestros airados hermanos paganos con respecto a las ideas y conceptos de los nórdicos Wicca.
Por desgracia, es especialmente un problema americano-pagano para mantener la mentalidad del monoteísmo, el “versus a la mentalidad” de “Si no está conmigo está contra mí”. Tratar con la comunidad Pagano se parce mucho a tratar con la iglesia católica o la mezquita. Una atmósfera demasiado represiva rocía con el azúcar de la justicia propia, mezclados. ¡Buen provecho!
En cuanto a la celebración de aquelarres, aunque no todos se superponen, varios de los germánicos y nórdicos son similares a los Wicca. Las diferencias serían la germánica Cake Fest en la primera luna nueva después de Yule y el Horse Fest el 22 de septiembre (especialmente importante para nosotros los sajones), por ejemplo. Los germanos no tenían Imbolc pero sobre todo en Suecia, la Disablot se celebró en esa época del año. Así que sí hay algunas diferencias aquí y allá, unas pocas – más de unas pocas – en los germánicos, los nórdicos, anglosajones, tradiciones islandesas también, aunque están todos relacionados. De todos modos, los nórdicos Wicca y germánicos y nórdicos paganos por igual han llegado con ganas de incorporar los días sagrados germánicos en la Rueda del Año y yo estaba feliz de ser testigo de la fusión de Brighid/Imbolc con un ritual maravilloso dedicado a Baldur y su esposa Nanna. Una opción muy reflexiva para celebrar Baldur en ese día.
¿Qué más nórdicos wicca será hacerlo o no hacerlo? es muy variable. Como muchos paganos, kindreds, Hofs, cultos, sub-cultos y similares existen, los nórdicos Wicca son muy versátiles, aunque en un nivel más individualistas sin la condena pagana de justos y todos los que no están de acuerdo con sus puntos de vista y prácticas.
En general, para los nórdicos Wicca todos los Dioses siguen siendo esencialmente el único Dios y todas las Diosas una Diosa. La naturaleza es sagrada, los Eddas y sagas son los textos que van a sacar fuerza, sabiduría e inspiración, hay nórdicos wiccanos que se centran más en los Ases, muchos de los Vanir y algunos incluso en el Rökkr, en función de sus preferencias personales o inclinaciones.
La Wicca Nórdica es una fe minoritaria, a menudo practicados por los solitarios e incluso los aquelarres no son muy abiertos y sí muy reservados para hablar acerca de sus prácticas. Ellos a veces temen a otros tipos de wiccanos porque ya han tenidoo sobre todo experiencias muy negativas con los paganos, tanto que son odiados y ridiculizados por ellos, etiquetados como “Wiccatru”, fluffy bunnies o mucho peor.
El uso de los símbolos nórdicos y su simbología es un hecho, además de que los nórdicos wicca como cualquier otro Wicca tiene el pentagrama. A menudo, también, la asignación de sus divinidades masculinas y femeninas o sólo los dioses que trabajan más cerca de sus necesidades individuales. Por ejemplo: Fuego – Surtr, Aire – Loki, Tierra – Fjörgyn, Agua – Ran y éter – su personal Dios Supremo, a veces Odin como el “Padre de Todos” para los wiccanos nórdicos, Ases o Freyr para el Vanatrur o Loki para el Rökkatrur .
Es mi sincera esperanza de que mientras los Paganos extremistas mantienen disputas y excluyen a todos los que se atreve a no estar de acuerdo con ellos, al menos, la Wicca y otras tradiciones paganas lentamente comiencen a ser más abiertas hacia los nórdicos Wicca, y que este último finalmente comenzará a salir de las sombras y reclamar lo que es suyo – un lugar que le corresponde en la comunidad pagana en todo el mundo.
*PS: Sólo como referencia, no soy nórdica Wicca. Tengo una docena de respuestas de paganos (americanos por supuesto), la mitad de todos ellos en mayúsculas (…) la otra mitad se ofrecen a enseñarme “sus formas” y me dijeron que mi religión era tan “real” como creer en los Jedi. A ellos les digo: Crecí en la Firne Situ, así que realmente no necesito sus opiniones en nuestros caminos del norte de Europa, gracias. Y gracias por demostrar mi corrección en relación con todo lo que he escrito sobre ustedes, la gente de aquí.?
Fuente: https://paganmeltingpot.wordpress.com
© Morgana Barcelona.
Mitología eslava.
La mitología eslava es la expresión del sistema de creencias cosmológicas y religiosas que los antiguos pueblos eslavos tenían antes de que adoptaran la religión cristiana. Se piensa que pudo desarrollarse a lo largo de 3000 años y que algunas creencias provienen del Neolítico o incluso del Mesolítico. Esta religión posee numerosos rasgos en común con otras descendientes de la religión protoindoeuropea.
Al contrario de lo que ocurre con la mitología griega o la mitología egipcia, no se han conservado fuentes de primera mano que permitan el estudio de la mitología eslava. A pesar de algunos testimonios controvertidos (como el Libro de Veles), no está probado que los eslavos poseyeran sistema alguno de escritura antes de que adoptaran el cristianismo. Las creencias religiosas y las tradiciones eslavas se fueron transmitiendo de manera oral durante generaciones, y fueron olvidadas tras la llegada del cristianismo. Sin embargo, se conservan datos sobre ellas en diversos escritos de los primeros misioneros cristianos que llegaron al territorio eslavo, aunque el interés que estos mostraron por dichas creencias no fue muy grande ni muy objetivo. Se conservan algunos restos arqueológicos (ídolos, tumbas, etc.), pero no amplían demasiado las informaciones ya existentes. En las canciones folclóricas y las leyendas populares de los pueblos eslavos sobreviven viejas creencias que remontan a la antigua mitología. Esta fragmentación de las fuentes hace que la tarea de establecer las creencias mitológicas de los antiguos pueblos eslavos sea difícil y compleja, dando como resultado numerosas malas interpretaciones, confusiones o simplemente embustes.
No poseemos fuentes escritas sobre la mitología eslava antes de que el pueblo protoeslávico se fragmentara en eslavos occidentales, orientales y meridionales. Quizá la única excepción sea las Historias de Heródoto, donde se mencionaba a la tribu de los neuri en el lejano norte, cuyos hombres, según el escritor griego, se podían transformar en licántropos; otros estudiosos sostienen que Heródoto realmente se refería a las antiguas festividades eslavas del carnaval, donde grupos de jóvenes pululaban por las aldeas portando máscaras y a los que se llamaba en ocasiones vucari (‘hombres lobo’). Con todo, el hecho de que los neuri sean identificados con los protoeslavos está aún por demostrar.
La primera referencia a los eslavos en la historia escrita la hace en el siglo VII el historiador bizantino Procopio de Cesarea, en cuya Bellum Gothicum (La guerra de los godos) describía las creencias de cierta tribu eslava meridional que había cruzado el río Danubio con dirección al sur en solo dos días. Según Procopio, estos eslavos adoraban a un único dios, señor de todo, que portaba el relámpago y el trueno y aunque el historiador no menciona explícitamente el nombre del dios, queda claro que esta descripción corresponde con Júpiter. Nosotros hoy en día lo interpretamos como Perun. Asimismo, menciona la creencia en varios demonios y ninfas (como por ejemplo las vilas), pero sin llegar a añadir más nombres.
La Crónica Primera es una importante obra que contiene valiosas referencias a las creencias paganas de los eslavos orientales. La crónica trata sobre la historia del primer estado eslavo oriental y, a pesar de que fue redactada a principios del siglo XII, contiene referencias y copias de documentos más antiguos, además de describir hechos anteriores al Bautismo de Kiev. Dos dioses, Perun y Veles/Volos, son los mencionados en el texto del tratado que firmaron los gobernantes paganos de los eslavos orientales y los Emperadores Bizantinos a principios del siglo X. Más tarde, el cronista Néstor describe el panteón estatal introducido por el príncipe Vladímir en 980, donde estaban representados Perun, Dazhbog, Stribog, Simargl y Mokosh. En el Códice Ipatiev (de la Crónica Primera) se menciona a Svarog, a quien se compara con el dios griego Hefesto. Asimismo, son muy interesantes los pasajes del relato épico de los eslavos orientales, El cantar de las huestes de Ígor, donde se hace referencia a Veles, Dazhbog y a Jors. Este relato fue escrito presumiblemente a finales del siglo XII, aunque aún hay controversia sobre la autenticidad de esta obra.
Los documentos escritos más numerosos y ricos pertenecen al paganismo de los eslavos occidentales, en especial de las tribus polabianas y veletianas, que fueron cristianizadas a la fuerza a finales del siglo XII. Los misioneros y sacerdotes germanos que lucharon contra las creencias paganas dejaron fe de los antiguos sistemas mitológicos que ayudaron a destruir. Sin embargo, se cuidaron de las “mentiras piadosas” y se esforzaron en mostrar a los eslavos paganos como unos bárbaros idólatras y sangrientos. Como ninguno de estos misioneros se molestó en aprender la lengua eslava, sus crónicas son una mezcla de valiosa información, errores, confusiones y burdas exageraciones.
Entre las obras más importantes se incluye una crónica escrita por Tietmaro de Merseburgo a principios del siglo XI, quien hizo una descripción de un templo en la ciudad de Riedegost (Radagast)dedicado al gran dios Zuarasic (Svarozhich). Según este autor, este lugar se contaba como el sancta sanctorum de las tierras de los eslavos paganos, siendo Svagorich su deidad más importante.
Otro documento de gran valor es la Chronica Slavorum (Crónica de los eslavos), escrita a finales del siglo XII por Helmold, un sacerdote germano, que menciona al demonio Zerneboh (Chernabog), al dios Porenut, a la diosa Siwa, a algunos dioses sin nombre cuyas estatuas tenían múltiples cabezas y finalmente al gran dios Svantevit, a quien se adoraba en la isla de Rügen y que era, según Helmold, el más importante de los eslavos occidentales.
El tercer documento y sin duda el más importante proviene del cronista danés Saxo Grammaticus, quien en su Gesta Danorum (La gesta de los daneses), describió la guerra llevada a cabo en el año 1168 por el rey danés Valdemar I contra los wendos de Rügen, la conquista de su ciudadela en el cabo Arkona y la destrucción del gran templo de Svantevit que allí se había edificado. Saxo describió meticulosamente el culto a Svantevit, sus ritos y la enorme estatua de cuatro cabezas erigida a su nombre, así como el resto de dioses policéfalos de las otras tribus eslavas: Rugiewit, Porewit y Porentius.
La cuarta fuente en orden de importancia la componen las tres biografías del obispo guerrero germano san Otón, quien a principios del siglo XII realizó numerosas expediciones militares y pastorales en las regiones bálticas donde moraban tribus eslavas pomeranias. Según el manuscrito, el dios eslavo más importante era Trigláv, cuyos templos en la ciudad de Szczecin eran tenidos por oráculos de renombre. En las ciudades de Wolgast y Havelberg se adoraba al dios Gerovit, en realidad una corrupción de Yarovit, una deidad eslava posiblemente idéntica a Yarilo en el folclore eslavo oriental.
Restos arqueológicos:
Se han descubierto numerosas estatuas de dioses eslavos. En 1848, a orillas del río Zbruch, se encontró una estatua alta de piedra con cuatro cabezas bajo un solo sombrero de piedra. Debido a la gran similitud con la descripción que hiciera Saxo Grammaticus del gran ídolo del templo de Rügen, la estatua fue inmediatamente identificada como la representación de Svantevit, aunque estaba claro que no podía ser el Svantevit original de Rügen. Muchas otras estatuas policefálicas se fueron descubriendo en diversos lugares. Una minúscula estatua de cuatro cabezas datada del siglo X, tallada en hueso, fue desenterrada en las ruinas de Preslav, la capital medieval de los zares búlgaros. En la Edad Media se descubrió en una isla del lago Tollensesee, cerca de Neubrandenburg, una estatua de madera con dos cabezas y de tamaño natural. En estos parajes vivió la tribu eslava de los Dolenain, cuyo nombre pervive en el nombre del lago. Además, se encontró una estatua tricefála en Dalmacia, Croacia, en una colina llamada Suvid, cerca del pico del monte Dinara, llamado Troglav.
Poco a poco los restos de numerosos santuarios eslavos han ido saliendo a la luz. Unas excavaciones arqueológicas en el cabo Arkona de la isla Rügen han descubierto los vestigios de un gran templo y una ciudad, identificadas como las que Saxo Grammaticus describiera. En Nóvgorod, en el antiguo skit de Peryn, los arqueólogos han descubierto los restos de un templo pagano dedicado supuestamente a Perun: consiste en una ancha plataforma circular alrededor de una estatua, circundada por una zanja con ocho ábsides, donde se situaban los altares para los sacrificios. Los restos de una ciudadela con parecida disposición fueron descubiertos en la localidad que lleva el sugerente nombre de Pohansko (Pagano), cerca de Breclav, en la República Checa.
Todos estos restos arqueológicos tienen en común muchísimos aspectos. Las estatuas de dioses de múltiples caras y los restos de los templos con mútiples altares para sacrificios confirman los informes escritos de los misioneros cristianos sobre el culto de los eslavos a dioses policéfalos, indicando asimismo que la antigua mitología eslava aparentemente puso gran énfasis en el culto de dioses con más de un aspecto.
Además, son de señalar los restos de varias piezas de alfarería datadas del siglo IV y procedentes de la cultura Cherniajov. El arqueólogo ruso Borís Rybakov ha identificado e interpretado los símbolos inscritos en ellas como los restos de un antiguo calendario eslavo.
Folklore:
Cuando fueron cristianizados varios pueblos eslavos entre los siglos VII y XII, la nueva religión se convirtió en la religión de la élite, con lo que floreció en las ciudades y entre la clase noble. Para la mayoría de la población eslava en la Edad Media, que habitaba en las zonas rurales, los viejos mitos continuaron siendo fuertes. Los sacerdotes cristianos y los monjes destinados a los países eslavos, especialmente en Rusia, lucharon durante siglos contra el fenómeno llamado dvoeverie (‘doble fe’). Por un lado, los campesinos y granjeros aceptaron a regañadientes el bautismo, las celebraciones de misas y los días santos de su nueva religión pero, por otro lado, seguían aferrándose a los antiguos ritos y a los cultos paganos, incluso cuando los viejos dioses y mitos en los que estaban basados habían sido olvidados por completo.[cita requerida]
Esto ocurrió porque, según la forma de pensar de un campesino eslavo, el cristianismo no reemplazaba la antigua mitología eslava, sino que más bien la asimilaba. El cristianismo podía haber ofrecido una esperanza en la salvación y en una vida después de la muerte, pero para sobrevivir en este mundo, para las cosechas anuales y proteger al ganado, el viejo sistema religioso, con sus ritos de fertilidad, sus deidades protectoras y sus espíritus domésticos, era más que necesario. Este problema nunca fue resuelto por completo por la Iglesia, como mucho pudo dar un santo cristiano o un mártir que reemplazara a una deidad pagana con un culto determinado, pero el culto en sí pervivió, como pervivió la cosmovisión mitológica por la que se explicaban todos los fenómenos naturales.
Así, se creó una situación algo absurda en el estudio de la mitología eslava. Mientras que las creencias y tradiciones populares de todos los pueblos eslavos eran la fuente más importante con la que reconstruir los antiguos cultos paganos, constituyendo de hecho la clave para desentrañar los secretos del ya olvidado panteón, eran también una fuente con una naturaleza tan inusual que no podían en modo alguno tomarse como dogma. Las canciones populares, los cuentos y las festividades habían perdido hacía muchos siglos su carácter original sagrado y mítico, así como su sentido original, con lo que fueron degradándose hasta un nivel de mera superstición [cita requerida] o a una tradición sin sentido aparente [cita requerida] que era repetida y transmitida a lo largo de generaciones, que en la mayor parte, no sabían lo que tenían entre manos. [cita requerida] El pueblo acunó una idea vaga y general sobre cómo celebrar determinadas festividades, cómo contar ciertos cuentos o cómo interpretar ciertas canciones, porque esa era la manera en la que se había venido haciendo desde siempre. Los cultos a los antiguos dioses se mezclaron con los de los nuevos santos cristianos; los viejos rituales se fusionaron con los cristianos y a lo largo de los siglos se fue completando el lío.
Esto condujo a que los estudiosos analizaran la estructura del folclore per se, desarrollando una metodología con la que pudieron reconstruir la mitología perdida a partir de esta estructura. Básicamente, podemos dividir las referencias folclóricas en dos grupos:
Cuentos de hadas acerca de varios personajes y criaturas fantásticos, como las canciones de Alkonost, Baba Yaga, Koschei el Inmortal, El Pájaro de Fuego (Zhar-Ptitsa) y Zmei; cuentos y leyendas de héroes legendarios como los bogatyres rusos; supersticiones sobre varios demonios y espíritus, como el domovoi, lijo, vilas (Veela o Willi), vampiros, vodianoi, rusalkas, etc. Muchos de estos cuentos y creencias pueden ser bastante antiguos y probablemente contengan al menos ciertos elementos de la antigua estructura mítica, pero no son mitos propiamente dichos. Adolecen de un sentido más profundo y sagrado, así como de significado religioso. Además, tienden a variar muchísimo entre los diferentes pueblos eslavos.
Fiestas populares, festividades cristianas y creencias populares sobre los santos. Es claro el ejemplo del profeta Elías, muy venerado en los países eslavos, como sincretismo del antiguo dios del trueno, Perun. Del mismo modo, se pueden encontrar restos de los antiguos dioses en los cultos dirigidos a otros santos, como san Vito, san Jorge, san Blas, santa María o san Nicolás. Asimismo, en varios funerales populares, como la de primavera de Jare o Jurjevo y la fiesta de verano de Ivanje o Ivan Kupala, ambas ligeramente asociadas a los días santos del cristianismo, abundan elementos precristianos. Estas creencias poseen un sentido religioso y sacralizado de consideración para las gentes que aún las realizan. El problema, por supuesto, es que tales elementos precristianos ya están irremediablemente mezclados en el cristianismo popular.
La reconstrucción de los mitos eslavos originales se convierte así en pura labor detectivesca, que requiere de conocimientos profundos de varias disciplinas científicas como la semiótica, la lingüística, la filología, la mitología comparada y la etnología. Los referentes folclóricos se deben analizar en su estructura, no como un mero corpus de canciones o cuentos, sino como grupos de signos y símbolos que contienen una lógica estructural interna. Cada signo está compuesto de una serie de palabras clave, que son mucho más que simples nombres de personajes, lugares o artefactos. Un aspecto crucial de los símbolos es que son casi inamovibles: sus nombres pueden diferir, pero no su estructura. Si se llega a cambiar o a perder esas palabras clave, el símbolo cambiaría a su vez, lo que invalidaría la lógica estructural interna del texto y dejaría sin sentido a todo el cuento, con lo que pronto se olvidaría, porque el modelo o la lógica por la que fue transmitido a lo largo de generaciones se perdería.
Un ejemplo lo podemos ver en el anteriormente citado dios del trueno, Perun, que fue suplantado en el folclore cristiano por san Elías. En otras ocasiones se le comparó con el arcángel san Miguel o incluso con el mismísimo dios Yahveh, mientras que en algunos cuentos populares rusos o bielorrusos bajó hasta la categoría de un mero personaje de cuentos, como el Tsar Ogin (Zar Llama) o Grom (‘trueno’). A pesar de los cambios de nombre, había siempre alguna palabra clave que describía a Perun como símbolo en los antiguos textos míticos y que ha perdurado en el folclore. Perun es siempre “gore” (arriba, en las alturas, en lo alto de la montaña o en el cielo); es un dios celeste, el mayor dios del panteón eslavo; es “suj” (seco, en oposición a mojado. Es el dios del trueno y del relámpago, causantes del fuego); es “treska/razbiya/goni/ubiya” (golpea/hiere/persigue/mata; es el dios del trueno y las tormentas, destructivo y furioso) con “strelá/kamen’/molniya” (flecha/piedra/rayo); las armas de Perun son sus haces de rayos, que dispara como flechas, tan poderosos que explotan y revientan las piedras. Estas son las palabras clave que siempre están presentes en los referentes folclóricos, incluso cuando el verdadero nombre de Perun había sido olvidado desde hacía tiempo. Por lo tanto, la estructura del símbolo permitió la identificación de Perun con personajes similares tanto de la religión cristiana como del folclore posterior que compartían tales similitudes en la estructura con sus propios símbolos.
Siguiendo una metodología parecida, trazando paralelismos con otras mitologías indoeuropeas (especialmente con la báltica) y en ocasiones utilizando las mismas pistas encontradas en los documentos históricos del paganismo eslavo, sería posible reconstruir algunos mitos antiguos. Durante los últimos 30 años se han logrado avances significativos en el estudio de la mitología eslava, sobre todo con los trabajos de los filólogos rusos Vladímir Toporov y Viacheslav Vsevolodovich Ivánov y con los científicos croatas Radoslav Katičić y Vítomir Belaj. Son igual de valiosos los estudios del investigador ruso Borís Uspenski y del filólogo y etnólogo serbio Veselin Čajkanović.
Sin embargo, la interpretación sin criterio del folclore y la reconstrucción de mitos sin poseer la formación adecuada puede conducir a efectos desastrosos, como veremos a continuación.
Referencias apócrifas:
Al estudiar la mitología eslava, uno debe andarse con pies de plomo con respecto a la validez y autenticidad de las fuentes. El interés científico en las creencias de los antiguos eslavos ha ido acrecentándose desde el Renacimiento, aunque también se ha disparado el número de confusiones, errores, malas interpretaciones y burdas reconstrucciones (sin mencionar las invenciones).
Antes de la primera mitad del siglo XX no se conocía niguna metodología científica válida con la que se pudiera interpretar los referentes folclóricos. Asimismo, al disponer de contadas fuentes arqueológicas e históricas, las puertas a la especulación más baladí estaban abiertas de par en par. Uno de los ejemplos más claros de la confusión general y de la interpretación errónea lo configura la falsa deidad del amor, Lada (o Lado), construida a partir de las exclamaciones sin sentido de las canciones de boda eslavas. Dioses como Koleda o Kupala fueron también inventados a partir de nombres mal interpretados de fiestas populares: Koledo era el nombre eslavo para las procesiones de los cantantes de villancicos en Navidad. La procedencia de Kupala es desconocida, aunque algunas fuentes cristianas insisten en que proviene de Ivan Kupala (traducción literal de Juan el Bautista), si bien esta afirmación tiene tan poca base como la que la interpretan como un día sagrado pagano. Esta celebración se realiza en el solsticio de verano en muchos países eslavos y occidentales como Francia, Italia o España. Esta tradición contiene sin duda más de un elemento precristiano, pero inventar dioses basándose en nombres de costumbres no es obviamente un método válido con el que reconstruir estas creencias. La errónea interpretación de las descripciones históricas de Tietmaro sobre el paganismo de los wendos llevó a confundir al dios Svarogich y a la ciudad donde se erigía su templo, Radegast. Dado que este último nombre puede ser reconstruido etimológicamente como “Estimado Huésped”, llevó a interpretarlo como el supuesto dios eslavo de la hospitalidad. Asimismo, para buscarle pareja al dios con el nombre más siniestro de todos los mencionados por Helmold, Chernobog (dios negro), inventaron a Belobog (dios blanco). Este nombre no aparece en ningún documento histórico o etnográfico fiable, al contrario, simplemente se asumió que ya que existe un dios negro, tendría que existir su contrapartida, el dios blanco. De nuevo, este no es un acercamiento científico al estudio de la mitología eslava, aunque se han venido escribiendo ríos de tinta acerca del dualismo Belobog-Chernobog hasta hoy día, incluyendo libros y referencias en investigaciones que dan por sentado que tales dioses fueron realmente adorados por los antiguos eslavos.
Peor aún que las confusiones o las malas interpretaciones son las invenciones deliberadas. Durante los siglos XIX y XX, la población se interesó cada vez más por la mitología eslava, aleccionados por los movimientos románticos, nacionalistas y neopaganos en la actualidad. El inventar evidencias de la antigua mitología fue, durante un tiempo, un auténtico hobby entre varios grupos sociales, a menudo con el simple objetivo de apuntarse un tanto. Por ejemplo, se llegaron a “descubrir” estatuas de los antiguos dioses con inscripciones de runas germánicas, o se “documentaron” canciones y cuentos populares en donde la mitad del panteón estaba recogiendo flores o danzando alegremente alrededor del fuego.
La Veda Slovena decimonónica no es más que una mistificación de las canciones populares búlgaras, con muchas supuestas referencias a la mitología eslava y que la mayoría de los investigadores considera una farsa. Un ejemplo más reciente lo podemos ver en el controvertido Libro de Veles, un documento supuestamente auténtico sobre la antigua religión, escrito en el siglo IX o X en alfabeto cirílico; no puede probarse que los eslavos tuvieran modo alguno de escritura antes de la cristianización, y menos aún que utilizaran el alfabeto cirílico (creado por san Cirilo para escribir las lenguas eslavas cuando fue enviado junto con su hermano Metodio a bautizarlos en el siglo IX). Los neopaganos eslavos utilizan este libro como texto sagrado y, por lo tanto, insisten en que el documento es auténtico. Sin embargo, el original, supuestamente escrito en cortezas de abedul, se perdió (sin contar que seguramente nunca existió), con lo que su autenticidad no puede probarse hoy en día.
Cosmología:
El concepto cosmológico del Árbol del Universo o de la Vida (мировое дрeво), bastante típico entre los hablantes de lenguas indoeuropeas, está presente también en la mitología eslava, en forma de roble, pino, abedul o ciprés, árboles sagrados. El símbolo mitológico del Árbol es muy fuerte y ha sobrevivido a lo largo de los siglos en el folclore eslavo tras la llegada del Cristianismo. Según algunas leyendas, el árbol crece en el centro del universo, sobre la roca mágica Alátyr situada en la isla Buyan, que flota en la mar y que tiene a sus pies toda clase de animales ctónicos. Hay tres niveles del Universo localizados en el árbol: su copa representa el cielo, el reino de los dioses y cuerpos celestes, mientras que su tronco simbolizaba el reino de los mortales. Estos dos niveles a menudo se combinaban en oposición a las raíces, que representaban el submundo, el reino de los muertos. En contraposición a las creencias populares, parece ser que el mundo de los muertos para los eslavos en realidad era un lugar hermoso, lleno de llanuras de verde y tierna hierba, donde imperaba la eterna primavera. A veces se le conocía como Virei o Iri.
El modelo de estos tres reinos en el Eje del Mundo inscrito en el Árbol tiene su correspondencia con una organización horizontal del mundo: el de los dioses y los mortales está situado en el centro de la tierra (si tenemos en cuenta que es plana, por supuesto), rodeado por un mar por el que se llegaría a la tierra de los muertos, a donde los pájaros migrarían cada invierno para regresar en primavera. En muchas referencias folclóricas, los conceptos de «marcharse atravesando el mar» y su contrario, «regresar atravesando el mar», son equiparados a morir y regresar a la vida, lo que recuerda al antiguo concepto mitológico de llegar a la vida después de la muerte cruzando una superficie de agua. Además, el mundo también está separado en el eje horizontal por los cuatro puntos cardinales, que representan las cuatro direcciones del viento (norte, sur, este y oeste). Estas dos divisiones en tres reinos para el eje vertical y cuatro puntos para el cardinal tuvieron mucha importancia en la mitología, como se puede ver en las estatuas que representan a los dioses, particularmente las de Triglav de tres cabezas y Svantevit, de cuatro.
El sol se entendía como una deidad femenina y la luna, masculina. Esta dicotomía es a primera vista contraria al concepto más extendido de las mitologías indoeuropeas, en las que el sol estaba normalmente asociado a deidades masculinas y la luna, a las femeninas, aunque es idéntico a la visión de la mitología germana y la mitología báltica, estrechamente relacionada con la eslava.
Panteón:
Una enorme cantidad de divinidades forman parte del panteón eslavo. Al parecer, cada una de las tribus eslavas (extendidas por una enorme zona geográfica que abarcaba desde el mar Báltico hasta el mar Negro) adoraba a sus propios dioses. La antigua religión eslava parece haber estado basada en el culto a la naturaleza, dependiendo de cada tribu las divinidades y las creencias concretas. Sin embargo, como ocurre con las distintas lenguas eslavas, que originariamente configuraban una sola lengua (el protoeslavo),sería posible dibujar un “Olimpo” protoeslavo y, mediante un estudio cuidadoso del folclore, podríamos reconstruir algunos elementos del panteón original, al que las diferentes tribus eslavas adoraban.
Dioses: En ocasiones se pueden encontrar estas gromoviti znaci o ‘marcas del trueno’ sobre los tejados de las casas, para protegerlas de los rayos. Símbolos idénticos han sido descubiertos en la cerámica protoeslava del siglo IV (cultura de Cherniajov). Se piensa que fueran símbolos del dios supremo del trueno, Perun.
Ivanov y Toporov reconstruyeron el antiguo mito de Perun y Veles/Volos. Ambos constituyen una oposición clara en casi todas las fuentes: Perun es el dios celestial del trueno y el rayo, fiero y seco, que gobierna el mundo de los vivos desde su ciudadela en las alturas, situada en la rama más alta del Árbol del Universo. Veles por el contrario es un dios ctónico, asociado con las aguas, terrenal y húmedo, señor del submundo, que gobierna el reino de los muertos desde abajo, en las raíces del Árbol del Universo. Perun le da lluvia a los granjeros, es el dios de la guerra y las armas y es invocado por todos los que luchan. Veles es el dios del ganado, protector de los pastores, asociado a la magia y al comercio. Perun da el orden, Veles causa el caos.
La batalla cósmica entre los dos recuerda al antiguo mito indoeuropeo de la lucha entre el dios de las tormentas y el dragón. Atacando con sus rayos desde el cielo, Perun perseguía a la serpiente Veles, que se deslizaba hacia las profundidades de la tierra. Veles insultó a Perun y huyó transformándose en varios animales, escondiéndose tras árboles, casas o personas. Al final, Perun da con él o escapa al agua con dirección al sub mundo; básicamente es lo mismo: al matar a Veles, Perun no lo destruye realmente, sino que lo devuelve a su lugar de origen, al mundo de los muertos. Así, el orden del mundo, cambiado por la travesura de Veles, es establecido de nuevo por Perun. La idea de que las tormentas y los truenos son una batalla divina entre el dios supremo y su acérrimo enemigo fue crucial para los eslavos, incluso después de que Perun y Veles fueran reemplazados por Dios y el Diablo. El rayo que golpea un árbol o que quema la casa de un campesino se explicaba siempre como un dios del cielo furioso atacando a su enemigo terrenal, ctónico.
La excusa que explicaba la enemistad de ambos dioses era el robo del ganado de Perun por parte de Veles o viceversa (aunque si Veles era el dios protector del ganado, no queda claro el asunto de la propiedad del mismo según este mito). El motivo mismo de robar ganado divino es muy común en la mitología indoeuropea: el ganado, de hecho, puede entenderse como una simple metáfora de las aguas celestiales o la lluvia. Así, Veles roba el agua de lluvia de Perun o viceversa, lo que de nuevo lleva a la confusa asociación de Veles con las aguas y de Perun con el cielo y las nubes, ya que no se sabe bien a quién pertenecería la lluvia. Otra razón que explicaría esta enemistad puede ser el robo de las esposas. Parece quedar claro, según referencias folclóricas, que se consideraba al Sol como la esposa de Perun. Sin embargo, dado que el Sol en la visión mítica del mundo muere cada noche y desciende más allá del horizonte hacia el sub mundo, donde pasa la noche, los eslavos entendían este fenómeno como el robo de la esposa de Perun por parte de Veles, aunque de nuevo podría entenderse el renacimiento del Sol por la mañana como el robo de la esposa de Veles por parte de Perun.
- Yarilo y Morana: Los investigadores Katicic y Belaj continuaron el trabajo comenzado por Ivanov y Toporov reconstruyendo el mito del dios de la fertilidad y la vegetación, Yarilo, y su hermana y esposa, Morana (Marena, Morena, Marana, todos los nombres provenientes de la misma raíz mor, ‘muerte’), la diosa de la naturaleza y la muerte. Yarilo está asociado a la luna y Morana es vista como la hija del sol. Ambos son hijos de Perun, nacidos la noche de Año Nuevo (La Gran Noche). Sin embargo, esa misma noche, Yarilo es raptado de su cuna y llevado al sub mundo, donde Veles lo educa como si fuera suyo. En la festividad de primavera de Yare/Yurievo/Yarilki, llena de simbología sexual y erótica, Yarilo regresa del mundo de los muertos («atravesando el mar») para traer al mundo de los vivos la primavera desde el sub mundo eternamente verde. Se le representaba como un joven y fogoso varón montado sobre un caballo blanco con una corona de flores en la cabeza, portando en la mano derecha un haz de trigo y en la izquierda una imitación de cabeza humana, símbolo de la muerte. El jinete recorría los campos de mies para favorecer una buena cosecha. Encuentra a su hermana Morana y la corteja, celebrándose a principios de verano su divino enlace con la fiesta conocido como Ivanie/Ivan Kupala. Esta unión sagrada entre hermanos, hijos del dios supremo, trae la fertilidad y la abundancia a la tierra, asegurando una gran cosecha. Asimismo, dado que Yarilo es hijo (hijastro, más bien) de Vierto que su esposa es hija de Perun, su matrimonio trae la paz entre los dos grandes dioses. En otras palabras, así se aseguraban de que no hubiera tormenta que pudieran dañar la cosecha.
Sin embargo, tras la cosecha, Yarilo le es infiel a su esposa y ella en venganza lo mata (lo devuelve al submundo), renovando la enemistad entre Perun y Veles. Sin su marido, dios de la fertilidad y las plantas, Morana y toda la naturaleza junto con ella se marchita y se hiela ante el invierno que se avecina, convirtiéndose en la terrible, vieja y peligrosa diosa de la oscuridad y del frío, muriendo finalmente al finalizar el año. El mito se repetía por entero cada año y los cantos de sus partes principales acompañaban las fiestas más importantes del calendario eslavo. Este cuento muestra también numerosos paralelismos con las mitologías báltica, sumeria e hitita.
- Svarog, Svarozhich (Svarogich), Dazhbog: El nombre de Svarog solamente se ha encontrado en los manuscritos relacionados con los eslavos orientales, donde normalmente se le equipara al dios herrero de los griegos, Hefesto. Sin embargo, este nombre es muy antiguo e indica que fue una deidad del panteón protoeslavo. La raíz svar significa ‘brillante, claro’, mientras que el sufijo rog denota lugar. Si se le compara con el sánscrito Swar, podemos ver que Svarog simplemente significaba ‘cielo claro’. Es posible que originalmente fuera el dios del cielo del panteón, quizá la versión eslava del protoindoeuropeo Dieus Piter. Svarog también puede significar un lugar brillante y fiero: una forja. Esto, junto con la identificación con el Hefesto de las fuentes históricas, nos indica que los eslavos también tuvieron un dios del fuego y de la herrería. Según la interpretación de Ivanov y Toporov, Svarog tenía dos hijos: Svarozhich, que representaba el fuego en la tierra, y Dazhbog, que representaba el fuego del cielo y estaba asociado al Sol. Se creía que Svarog había forjado al Sol y que se lo había dado a su hijo Dazhbog para que lo llevara a lo largo y ancho del cielo.
En los manuscritos rusos, es equiparado al Sol y según el folclore se le recuerda como la deidad bondadosa de la luz y el cielo. Sin embargo, el folclore serbio lo representa como un dios mucho más oscuro en la forma de Dabog, quien custodiaba las puertas del sub mundo, tenía un aspecto horrible, cojeaba y estaba asociado con la minería y los metales preciosos. Veselin Čajanković señala que estos dos últimos aspectos cuadran perfectamente con el simbolismo que rodea a la deidad solar eslava: una parte benévola representa a Dazhbog durante el día, cuando lleva al Sol a lo largo del cielo; la parte malévola y fea, Dabog, lleva al sol al sub mundo durante la noche. Este patrón puede aplicarse también al ciclo solar anual, donde el aspecto positivo se asocia al joven Sol de verano y el negativo, al viejo Sol de invierno.
Svarozhich fue adorado como un espíritu del fuego por los campesinos rusos mucho después de que fueran cristianizados. También fue conocido por los eslavos occidentales, pero allí se le adoró como la deidad suprema en la ciudad santa de Radegast. El término Svarozhich es en eslavo un simple diminutivo de Svarog y como tal pudiera ser un aspecto complementario (una especie de apellido) de Dazhbog. También hay quien sostiene que Svarog era el antepasado de todos los dioses eslavos, con lo que Svarozhich podría ser un epíteto de otra deidad, así que tanto Dazhbog como Perun, Veles y los demás también serían “Svarozhichs”.
- Svantevit y Triglav: No deja de resultar irónico que de momento no se haya podido aclarar el papel de estos dos dioses en el panteón protoeslavo, a pesar de tener el mayor número de documentos históricos. El que sean importantes para todos los eslavos paganos está probado por el increíble número de topónimos que se les asocia y por los numerosos descubrimientos de estatuas policéfalas en varios países eslavos. Ambos dioses son los principales en varias localidades, estaban asociados a la adivinación y su animal totémico era el caballo. Posiblemente una diferencia importante era que Svantevit tenía un caballo blanco, mientras que el de Triglav era negro, además de que la representación de Svantevit tenía cuatro cabezas y la de Triglav (cuyo nombre significa simplemente “de tres cabezas”) poseía tres. Svantevit estaba asociado asimismo a la victoria en la guerra, a la cosecha y al comercio.
Se han barajado varias hipótesis sobre estos dos dioses: según la primera, ambos son el mismo dios, ya que son similares en casi todos sus aspectos; otra sostiene que no son dioses en absoluto, sino compuestos de tres o cuatro dioses, una especie de minipanteón. Los neopaganos eslavos suelen ver a Triglav como un concepto de Trinidad. Svantevit ha sido también visto como la alteración de los eslavos occidentales de Perun o Yarilo, o incluso comparado con Svarozhich como deidad solar. Ninguna de estas hipótesis parece ser muy convincente y la mayoría se basan en las especulaciones más peregrinas, mientras que otras intentan reconstruir la mitología eslava como debería ser y no como lo que fue en realidad. Es preciso investigar mucho más para llegar a conocer la verdadera identidad de estas deidades.
- Zoria y Danica: Estos nombres significan simplemente Estrella de la Noche y Estrella de la Mañana, pero en las leyendas folclóricas de todos las naciones eslavas son a menudo descritas como personas o asociadas a personas, de una manera muy parecida al Sol y la Luna. A Danica en ocasiones se la denomina la hermana menor del sol o su hija y probablemente estaba relacionada con Morana. Por lo tanto, Zoria era o bien la madre o la hermana mayor del sol. Es muy problable que fuera un remanente eslavo de la diosa protoindoeuropea del anochecer, Hausos, pero habrá que investigar mucho sobre este tema antes de sacar más conclusiones.
No pueden contarse en el panteón protoeslavo otros dioses, aparte de los referidos anteriormente. Sin embargo, es de destacar que muchos de estos dioses probablemente fueran conocidos con diferentes nombres incluso en la misma lengua. Los tabús religiosos en la denominación de las deidades existieron entre los eslavos y, por ello, los dioses fueron llamados con otros nombres o adjetivos que describían sus cualidades. Con el tiempo, estos mismos adjetivos tomaron vida.
Mitología:
- Ivanov y Toporov hicieron un esquema sobre los distintos estadios que pudo desarrollar la mitología eslava, en un intento de mostrar cómo pudo haber evolucionado a partir del panteón original:
El primer desarrollo pudo ocurrir tras el desmembramiento de los proto eslavos en eslavos occidentales, orientales y meridionales. Cada rama de la familia ideó deidades diferentes que englobaran la artesanía, la agricultura y la fertilidad, como Rod y Chur, varias diosas relacionadas con el hogar, como Mokosh. Dioses como Jors o Simargl son a veces consideradas préstamos que los eslavos orientales tomaron de sus vecinos iranios.
En el ámbito de la personificación abstracta de funciones divinas, tenemos conceptos del tipo pravda/krivda (‘correcto/incorrecto’), dobra kob/zla kob (‘buena fortuna/mala fortuna’). Tales conceptos los podemos encontrar en muchos cuentos de hadas eslavos y se piensa que nacieron en un momento en el que los viejos mitos ya estaban degradándose a los niveles de leyendas o cuentos. Louis Leger señaló que varias palabras eslavas que entraban en el campo semántico del éxito, el destino o la fortuna están conectadas con la palabra eslava para Dios, “Bog”. Aunque era usada para el dios cristiano, la palabra es de origen pagano y muy antigua, ya que podría provenir de la raíz protoindoeuropea *bhag (‘fortuna’), relacionada con el avéstico baga y el sánscrito bhaga (que son ambos nombres de dioses).
El siguiente nivel de desarrollo se dio al convertir en mito las tradiciones históricas, un fenómeno que habría comenzado en tiempos paganos y continuaría mucho después del advenimiento del cristianismo. Se caracterizó por tomar cuentos y canciones de héroes legendarios, que irían desde fundadores legendarios de ciertas tribus ―como las historias sobre Lej, Chej y Rus (padres respectivamente de polacos, checos y rusos)― hasta personajes históricos como el rey croata-húngaro del siglo XV, Matías Corvinus, o el príncipe Marko de los eslavos del sur, quienes fueron inmortalizados en las leyendas populares o la poesía. Las bylinas rusas sobre los bogatyri (héroes legendarios), las leyendas polacas sobre Krak, el Matadragones, las checas sobre Libuše y la fundación de Praga entran en esta categoría. Aún en varios elementos de estos cuentos se pueden ver elementos de los viejos mitos, como el héroe que mata al dragón, un remanente lejano del antiguo concepto de la batalla cósmica entre el dios del rayo, Perun, y la serpiente, Veles.
- Baba Yaga, de Iván Bilibin: En un nivel menor encontramos a ciertos arquetipos míticos convertidos en personajes de cuentos de hadas, donde se incluiría a Baba Yaga, Koschei el Inmortal, El Ruiseñor Ladrón, Vodianoi, Zmei Gorynych, etc. En este nivel, apenas se puede ya hablar de mitología, sino más bien de leyendas y cuentos que contienen fragmentos de viejos mitos pero que en su estructura y significado no están claros.
El nivel más bajo incluye varios grupos de espíritus domésticos o de la naturaleza y criaturas mágicas, que varían muchísimo en los diferentes pueblos eslavos. La estructura mítica en ese nivel es prácticamente incomprensible, pero algunas creencias tienen una antigüedad considerable. Ya en el siglo V, Procopio mencionaba que los eslavos adoraban a espíritus de los ríos y de la naturaleza, pudiendo encontrar incluso hoy en día sus huellas en los cuentos sobre vilas (Veela o Willi), vampiros (upyr), brujas y hombres lobo.
Calendario y festivales:
Los mitos eslavos eran cíclicos, repitiéndose cada año una serie de festividades que seguían los cambios de la naturaleza y las cuatro estaciones. Para entender su mitología, es importante entender su concepto de calendario. Basándose en el folclore y restos arqueológicos, es posible reconstruir algunos elementos del calendario precristiano, particularmente las más importantes.
El año era lunar, aparentemente, y comenzaba el primer día de marzo, en forma similar a otras indoeuropeas, cuyos sistemas de calendario son más conocidos para nosotros. Para la última noche del año viejo y el primer día del año nuevo se conocen nombres como Velia Noch/Velik Dan’ (Gran Noche/Gran Día). Después de la Cristianización, estos nombres fueron remplazados probablemente por las Pascuas. En algunas iglesias eslavas pertenecientes a las diferentes Iglesias Ortodoxas, la Pascua es conocida como Velik Dan/Gran Día, mientras que entre los eslavos católicos es conocida como Velika Noch/Gran Noche. Todos estos nombres son seguramente traducciones del griego Megale Hemera, Gran Semana, el término cristiano para la semana en que cae Pascuas (semana Santa). En tiempos paganos, de todas formas, probablemente era una fiesta similar a Halloween. Ciertas personas (chamanes) se adornaban con máscaras grotescas y ropajes confeccionados de pieles o lanas de oveja, rondando por las aldeas, ya que durante la Gran Noche se creía que los espíritus de los ancestros viajaban a lo largo de la tierra, entrando en los pueblos y las casas para celebrar el año nuevo con sus familiares vivos. Por consiguiente, la deidad del último día del año era probablemente Veles, dios del sub mundo.
Había una gran fiesta de la primavera dedicada a Yarilo, dios de la vegetación y la fertilidad. Procesiones de jóvenes solían ir por las aldeas con ramos de flores como símbolo de nueva vida. Iban casa por casa recitando canciones y bendiciendo cada hogar con ritos de fertilidad tradicionales. El líder de la procesión, generalmente a caballo, sería identificado con Yarilo. La costumbre de hacer pisanki o huevos decorados, símbolos también de nueva vida, era otra tradición asociada con esta celebración, que más tarde pasó a la Pascua cristiana.
El festival de solsticio de verano es conocido hoy como Ivanie, Kupala o Kries. Se celebraba en forma similar a una gran boda y, de acuerdo a indicaciones de ciertas fuentes históricas, era seguido ―en épocas paganas― por una orgía general. Había grandes cantidades de comida y bebida la noche anterior, se encendían grandes hogueras (en eslavo kres), y los jóvenes copulaban y danzaban en círculos o saltaban a través del fuego. Las jóvenes hacían guirnaldas con flores y helechos (que aparentemente era sagrado en esta celebración), las batían en los ríos y dependiendo de cómo y adonde flotasen, se podría saber si el elegido se casaría o no. El baño ritual esta noche era también muy importante: de ahí el nombre de Kupala (del verbo kupat’sia, ‘bañarse’), que seguramente casaba muy bien con el santo patrón que la Iglesia puso para este día, Juan el Bautista. En general, la fiesta conmemoraba con seguridad la boda divina del dios de la fertilidad, asociado con el crecimiento de las plantas para la recolección.
En medio del verano había un festival relacionado con el dios del trueno Perun, transformado en tiempos cristianos en el importante festival del profeta Elías. Era considerada la época más sagrada del año, registrándose algunas indicaciones de fuentes históricas relacionadas con sacrificios humanos. Probablemente después del mismo comenzaba la cosecha.
No queda claro cuándo se celebraba exactamente el fin de la cosecha, pero los documentos históricos mencionan interesantes tradiciones asociadas a las celebraciones en el templo de Svantevit, en la isla de Ruyana (hoy en día Rügen), que sobrevivió en el folclore posterior. Las gentes se reunían frente al templo, donde los sacerdotes emplazarían un gran pastel de trigo del tamaño de un hombre. El sumo sacerdote se colocaba tras el pastel y preguntaría a las gentes si le veían. Independientemente de la respuesta, el sacerdote plugaría que el siguiente año la gente no le viera tras el pastel ritual, augurando que la cosecha del siguiente año sería más provechosa.
Seguramente también hubo un importante festival alrededor del solsticio de invierno, que más tarde fue asociado con la Navidad. A su vez, en muchos países eslavos, esta festividad es llamada Bozhich (que significa ‘pequeño dios’). Aunque este nombre encaja fácilmente con la idea cristiana de Navidad, tiene seguramente un origen pagano: indica el nacimiento de un joven y nuevo dios del Sol de la vieja y debilitada deidad solar, durante la noche más larga del año. El viejo sol era identificado como Svarog y su hijo, el joven y nuevo sol, como Dazhbog. El nombre alternativo (y tal vez el original) de este festival era Korochun.
Fuente: Enciclopedia de las mitologías.
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